Tema III: Sistema educativo español.

1.1   Fase de explicación

El sistema educativo en España ha sido objeto de desarrollo según en el periodo histórico en el que se encontrara. Podemos decir que el sistema educativo puede concebirse como un subsistema social ya que sirve como medio de transmisión de valores, ideologías, creencias y conocimientos para el correcto mantenimiento de la sociedad.

En la España del siglo XVIII no existía ningún sistema educativo, sino un conjunto de instituciones que no tenían relación entre sí y según el origen social del individuo (pueblo llano, nobleza o clero) la formación era distinta. Se establecieron dos niveles de enseñanza, en el primero se encontraban las escuelas de primeras letras y las escuelas monásticas; y en el segundo nivel encontrábamos las escuelas de latinidad y las facultades menores. El control de la educación y la enseñanza estaba en manos de la Iglesia, siendo las únicas instituciones que trabajaban de forma sistemática.

Tras la Constitución de 1812, se mandó establecer en todos los pueblos de la Monarquía escuelas de primeras letras para que los niños tuvieran una formación básica de cara a leer, escribir, contar y al catecismo de la religión católica. Tras este gran acontecimiento nació el sistema educativo liberal, que fue establecido definitivamente en la Ley Moyano de 1857 ya que anteriormente debido a la gran sucesión de gobiernos conservadores y pronunciamientos progresistas, la educación se encuentra en una situación de inestabilidad.

Tras la victoria de Franco en la guerra civil, el sistema educativo en España dio un giro considerable consolidándose un sistema educativo autoritario, caracterizado por la instrucción ideológica que transmitía los principios políticos del régimen franquista. La función de la educación era rehabilitar los principios de Autoridad y Orden para mantener la sociedad que por aquellos tiempos resultaba caótica. Para ello se llevó a cabo una modalidad disciplinaria que Foucault (1981) definió de la siguiente manera:

La modalidad que implica coerción ininterrumpida, constante, que vela sobre los procesos de la actividad más que sobre sus resultados y se ejerce según una codificación que reticula con la mayor aproximación el tiempo, el espacio y los movimientos.” (Foucault,M., 1981).

A través de esta modalidad se puso en práctica un sistema educativo capaz de transmitir un modelo de sociedad autoritaria basado en los principios que se establecieron tras la victoria franquista. Según Bernstein, esta modalidad se basaba en dos órdenes que constituían la cultura escolar: el orden expresivo que se manifiesta en las formas de disciplina llevadas a cabo en la organización de la escuela y sus relaciones con el exterior; y, por otro lado, el orden instrumental que viene fuertemente determinado por el currículum y las formas de transmisión pedagógica de las instituciones docentes. El sistema de organización educativo se llevó a la crítica y reflexión por diversos autores como Charles Bidwell, Eric Hoyle, Ronald King, William Tyler, Jeanne H. Ballantine y Maureen T. Hallinan, entre otros, realizando grandes aportaciones al ámbito educativo. 

Después del establecimiento de este sistema educativo que hoy en día sigue teniendo ciertas características con el actual; con la llegada de los tecnócratas al poder se promulgó la Ley General de Educación que se desarrolló en gran medida en un contexto democrático.

 Por último, el último sistema educativo que se estableció en España y sigue vigente hasta hoy, a pesar de las numerosas leyes y reformas que se han llevado a cabo, es el sistema educativo democrático que se desarrolló tras la caída del régimen franquista y que supuso la ruptura del carácter uniforme y centralizado del currículum. Se apuesta pues, por un modelo de escuela comunitaria que se caracteriza por el acercamiento de la educación al pueblo, el aumento del periodo de escolarización y de la gratuidad, además de la participación de la comunidad educativa constituida por profesores, padres y alumnos. Destacan entre todas las leyes y reformas en el sistema educativo, la Ley Orgánica del Derecho a la Educación (LODE), la Ley de Reforma Universitaria (LRU) y la reciente Ley Orgánica para la Ordenación General del Sistema Educativo (LOGSE). Todas ellas han aportado innovaciones relevantes para mejorar el sistema educativo español.



1.2   Fase de reflexión

Para esta fase de reflexión, he decidido incluir uno de los experimentos de la psicología social más importantes que ha repercutido en el ámbito de la educación. Se trata de la “Tercera Ola”. Fue un experimento que se utilizó para demostrar el atractivo del fascismo y que fue llevado a cabo por el profesor de Historia Contemporánea Ron Jones con sus alumnos. A continuación, a través de este artículo periodístico voy a exponer la finalidad de este experimento sociológico.

“Denis Gansel dirigió en 2008 «La ola», uno de los títulos más apasionantes del último cine alemán. La película trasladaba a Alemania el experimento de un profesor de Historia de Palo Alto (California), Ron Jones, que en 1967 demostró a sus alumnos lo fácil que es poner en marcha un movimiento totalitario. Al quinto día, el entusiasmo desmedido de los jóvenes hizo que aquello se le fuera de las manos. […]

[…]el documental «La tercera ola, fascismo en la escuela», que relata el innovador y peligroso experimento puesto en marcha por el profesor para alejar a sus alumnos de los atractivos del totalitarismo y del sentimiento de pertenencia a un grupo.

Ron Jones creó un estado fascista virtual dentro de su instituto, pero ni él mismo esperaba que los alumnos lo siguieran de una forma tan «consecuente». Los estudiantes crearon un saludo propio y seleccionaron incluso a un grupo de informantes que actuaban como si fueran miembros de la Gestapo, en una fiel recreación del funcionamiento del Tercer Reich. El grado de furor que Jones provocó marcó a los estudiantes de por vida. «La Tercera Ola» no fue una simple anécdota de instituto, sino que es un aviso que sirve (o debería) como alerta permanente.” (Martín, F. [2012, 16 de febrero]. “La tercera ola”, el fracaso de un experimento antitotalitario. ABC. Recuperado de http://www.abc.es/20120216/tv/abci-tercera-canal-historia-201202161230.html )

(Anónimo. Fotografía de la película "la ola". [Fotografía]. Recuperado de http://farm4.static.flickr.com/3362/3226359873_e5ec1a0852_o.jpg )
Este experimento se llevó a cabo en cinco días. Desde un primer momento, Ron Jones inculcó a sus alumnos la disciplina como estrategia para tener éxito en sus vidas. De esta manera sus alumnos empezaron a adoptar ciertos modales y reglas que eran impuestas por él mismo, por muy ridículas que estas resultaran. Sus alumnos solo se ceñían a obedecer a la autoridad para manifestar así su disciplina. En los siguientes días, sus alumnos adquirieron un saludo, un símbolo e incluso una bandera que los representaba. Cada día la masa crecía más, y esto preocupaba a Jones el cual decidió acabar con el experimento al cuarto día ya que se le iba de las manos. Decidió reunir a todos los participantes del experimento al quinto día en el gimnasio del colegio donde declaro delante de todos ellos que en ningún momento había existido ningún líder que defendiera “La Ola”, pero ellos en cambio la habían adoptado como forma de vida sin llegar a plantearse si sus actos estaban bien o mal; solamente se ciñeron a seguir a un líder que jamás habían visto antes.

En conclusión, este experimento puede ser relacionado con el sistema educativo autoritario que se llevó a cabo en la época franquista. A través del sistema que se impuso durante esos años, se impartió una modalidad basada en la disciplina, la autoridad y el orden, como estableció Ron Jones en su clase de Historia con sus alumnos. Estos asumieron y obedecieron a la autoridad y se rigieron a las reglas que estableció el profesor por muy absurdas que estas parecieran debido a que esta es la ideología que estaba impuesta en cada uno de ellos. “La Ola” nos hace reflexionar sobre el valor de la autoridad en los sistemas educativos y sobre el rol que ejercen los docentes en las aulas. 

1.3   Fase de aportaciones

En relación con este tema basado en los distintos sistemas educativos que se han impuesto en España, me gustaría realizar una aportación sobre otro experimento de la psicología social que fue ideado por el psicólogo Philip Zimbardo. A continuación, les dejo el vídeo que les explica la finalidad y los datos más relevantes sobre este sorprendente experimento.

Vallester. (2013, 28 de septiembre). Documento Psicología Experimento de la cárcel de Stanford. [Archivo de video]. Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=sOYx02bAxXQ )

El experimento fue realizado en Standford en 1971 por un grupo de psicólogos que inspirados por el famoso experimento de Milgram y liderados por Philip Zimbardo decidieron llevar a cabo un experimento que pusiera a prueba la bondad humana. ¿Somos capaces de desobedecer órdenes de alguien que posee cierta autoridad sobre nosotros por la mera razón de que el acto no sea bueno?, o en cambio, ¿somos capaces de realizar atrocidades por obedecer a la autoridad?

(Anónimo, 2013. Fotografías del experimento de la prisión de Stanford [Fotografía]. Recuperado https://jordanianobservations.files.wordpress.com/2013/04/spe.jpg?w=500 )
En este experimento fueron reclutados varios estudiantes a los que se les ofrecía una cantidad de dinero por formar parte de este. El experimento consistía en demostrar hasta donde sería una persona capaz de llegar asumiendo un rol determinado y obedeciendo a la autoridad. Cada uno de los participantes tuvieron que ejercer el papel que se les asignó, una parte de los estudiantes debían de ejercer el rol de prisioneros y los restantes asumían el papel de carceleros. El experimento que estaba programado para durar dos semanas tuvo que ser cancelado al sexto día debido a que todos los participantes, incluido el director del experimento, fueron asumidos por los roles que debían de jugar en la prisión simulada y no eran conscientes de que este solo era un simple experimento. Los carceleros realizaron grandes atrocidades con los prisioneros aparentando la normalidad.

Mi aportación a este tema se centra en la perspectiva de un sistema autoritario en este experimento en concreto. Por un lado, se encontraban los presos que asumían y obedecían todo lo que los carceleros les mandaban ya que estos resultaban ser la referencia de autoridad para los prisioneros. Los carceleros imponían sus reglas y disciplina, y los presos se conformaban a estas y las obedecían. Según iban transcurriendo los días esta relación de autoridad-sumisión iba creciendo, al igual que la forma de violencia. Por otro lado, se encontraban los carceleros que también asumían y obedecían las órdenes que les ordenaba Zimbardo con lo que tenían que realizar en cada momento. Ante esta situación se puede observar un sistema autoritario llevado a una situación, que por lo que respecta, no tiene relación con la educación ya que se trata de una simulación de cárcel. Este experimento dejó una gran huella psicológica en gran parte de los voluntarios que vivieron cada una de las experiencias de forma traumática y que aún, hoy en día, les cuesta explicar su comportamiento durante esos días.


Referencias

Filmus, D., & Frigerio, G. (1988). Educación, autoritarismo y democracia. Buenos Aires: Mino y Davila Editores.

Martín, F. (2012, 16 de febrero). “La tercera ola”, el fracaso de un experimento antitotalitario. ABC. Recuperado de http://www.abc.es/20120216/tv/abci-tercera-canal-historia-201202161230.html

Bibliografía

Filmus, D., & Frigerio, G. (1988). Educación, autoritarismo y democracia. Buenos Aires: Mino y Davila Editores.

Guerrero, A. (2015). Manual de sociología de la educación.

Vallester. (2013, 28 de septiembre). Documento Psicología Experimento de la cárcel de Stanford. [Archivo de video]. Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=sOYx02bAxXQ



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